El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, advirtió que su gobierno podría imponer aranceles adicionales y restricciones a las exportaciones de los países que adopten impuestos o regulaciones digitales que, a su juicio, perjudiquen a las compañías tecnológicas estadounidenses.
Aunque no mencionó países en particular, sus declaraciones fueron interpretadas como una respuesta directa a la Unión Europea (UE), que en los últimos años ha impulsado un marco regulatorio más estricto para compañías como Google, Apple o Meta.
En un mensaje publicado en Truth Social, Trump acusó a algunos gobiernos de “atacar a nuestras increíbles empresas tecnológicas estadounidenses” mediante legislaciones que, según dijo, buscan “dañar o discriminar” a estas compañías.
La UE ha aprobado medidas de amplio alcance para regular las plataformas digitales. La Ley de Servicios Digitales busca garantizar un mayor control sobre redes sociales y espacios en línea, mientras que la Ley de Mercados Digitales busca frenar prácticas monopólicas, con sanciones que pueden ascender a miles de millones de euros. Además, países como Francia, Italia y España han establecido impuestos específicos a los servicios digitales, al igual que el Reino Unido.
Trump también criticó que empresas tecnológicas chinas no estén sujetas a las mismas restricciones. “Esto debe terminar”, afirmó, al tiempo que prometió sanciones “considerables” en caso de que no se eliminen lo que calificó como “acciones discriminatorias”.
La Comisión Europea respondió señalando que la regulación del sector digital es un derecho soberano de los estados miembros. “La UE y sus estados miembros tienen el derecho soberano de regular las actividades económicas en nuestro territorio, lo cual es coherente con nuestros valores democráticos”, declaró el portavoz Thomas Regnier.
La advertencia del mandatario republicano ocurre pocos días después de que Washington y Bruselas emitieran una declaración conjunta en la que ambos gobiernos se comprometieron a trabajar contra “barreras comerciales digitales injustificadas”.
No es la primera vez que Trump utiliza este tipo de amenazas en el ámbito digital. En junio pasado presionó a Canadá para frenar la propuesta de un impuesto a los servicios digitales, lo que llevó al primer ministro Mark Carney a retirar temporalmente la iniciativa.
Fuente: Proceso