Costa Rica
El debate sobre el proyecto de jornadas laborales 4-3 mantiene al plenario de la Asamblea Legislativa concentrado en un solo tema durante meses, con proyecciones que sugieren que las votaciones podrían extenderse más allá de las elecciones presidenciales del 1.º de febrero de 2026.
Según un cálculo realizado por La Nación, considerando las 2.380 mociones de fondo pendientes, más 2.564 revisiones potenciales, el plenario tendría que tramitar un total de 4.944 mociones para completar el proceso. Este análisis no incluye el receso legislativo, que inicia el 19 de diciembre de 2025 y se extiende hasta el 12 de enero de 2026.
El jueves pasado, a las 7 p. m., se votó la moción 184 de fondo sobre el expediente 24.290, que propone jornadas de cuatro días de trabajo de 12 horas y tres días libres para empleados de diversos sectores productivos. En sesiones recientes, los diputados han tardado, en promedio, 6,75 minutos por votación, lo que implicaría unas 185 sesiones de tres horas para completar la agenda de mociones. Bajo este ritmo, la tramitación se prolongaría hasta la última semana de febrero de 2026.
El interés en acelerar el proceso ha generado tensiones entre las fracciones legislativas. Pilar Cisneros, jefa de los diputados del Partido Progreso Social Democrático (PPSD), aseguró que, con mayor disciplina, el tiempo podría reducirse a un tercio, acortando la tramitación a dos meses. “Una votación no debería durar más de dos minutos. Muchos retrasan su voto y deben ser llamados al orden una y otra vez”, indicó.
Por su parte, Alejandro Pacheco, jefe de la Unidad Social Cristiana (PUSC), responsabilizó al Frente Amplio por la lentitud y destacó la necesidad de liberar espacio para otros proyectos legislativos. Mientras tanto, la jefa del Frente Amplio, Rocío Alfaro, criticó la vía rápida aplicada al proyecto de jornadas y señaló que la presión de la mayoría ha limitado la atención a otros temas legislativos importantes.
Cisneros subrayó que, en un contexto de competencia por inversión extranjera y generación de empleo, avanzar con el proyecto de jornadas 4-3 constituye un “deber patriótico”. Sin embargo, la tramitación intensa ha obligado a sesiones dobles y ha generado interrupciones frecuentes, reflejando un ritmo legislativo que aún no logra equilibrar debate y eficiencia.
Hasta el cierre de esta edición, otros líderes de fracción —Óscar Izquierdo (PLN), Fabricio Alvarado (PNR) y Gilberto Campos (PLP)— no habían emitido comentarios sobre el avance del proyecto.
Fuente: Nación