El expresidente Donald Trump, quien busca nuevamente la nominación republicana, votó este martes en Palm Beach, Florida, y se mostró optimista al afirmar que “esta noche será una gran victoria”.
Al salir del centro de votación, Trump se dirigió a los medios y destacó que aceptaría su derrota “si la elección es justa”. Sin embargo, expresó inquietudes sobre el uso de máquinas de votación electrónica y criticó las posibles demoras en el conteo de votos. “Nos está yendo muy bien en Georgia y en otros lugares”, agregó, acompañado de su esposa Melania.
Hoy, 5 de noviembre, alrededor de 244 millones de estadounidenses están convocados a las urnas. De ellos, 80 millones ya han votado anticipadamente, tanto en persona como por correo. Además del presidente, los votantes elegirán 435 miembros de la Cámara de Representantes y un tercio del Senado, así como varios gobernadores, alcaldes y otros cargos locales. También se decidirá sobre diversas iniciativas, incluidas propuestas relacionadas con el aborto en diez estados.
Los centros de votación abrieron a las 5:00 a.m. hora local, marcando el inicio de una jornada electoral histórica, donde los estadounidenses votarán entre la vicepresidenta y candidata demócrata, Kamala Harris, y el exmandatario republicano Donald Trump.
Los primeros en emitir su voto fueron los residentes de Vermont, seguidos a las 6:00 a.m. por otros estados, incluyendo Connecticut, Kentucky y Nueva York. Los horarios de votación varían significativamente, ya que los 50 estados y el Distrito de Columbia abarcan seis husos horarios diferentes. A medida que avanza la jornada, más estados irán abriendo sus centros de votación hasta que los últimos, California e Idaho, lo hagan a las 3:00 p.m.
Esta jornada electoral no solo es crucial para la presidencia, sino también para el futuro político de numerosos representantes y decisiones legislativas importantes en todo el país.