El Salvador
Después de dos años y medio de implementar un régimen de excepción que ha suspendido derechos fundamentales en El Salvador, el presidente Nayib Bukele está considerando la posibilidad de levantar esta medida. Originalmente instaurado en marzo de 2022 como una estrategia para combatir las pandillas, el régimen de excepción ha generado un considerable debate sobre su impacto en los derechos humanos.
En una reciente entrevista con la revista Time, Bukele sugirió que los avances logrados en la reducción de homicidios y la detención de casi 81,500 personas podrían permitir una transición fuera del régimen de excepción sin comprometer la seguridad alcanzada.
"En un horizonte cercano, esperamos poder eliminar el régimen de excepción y regresar a la normalidad constitucional mientras mantenemos la paz con procedimientos judiciales ordinarios", afirmó Bukele, dejando abierta la fecha para esta potencial decisión.
Desde su implementación, el régimen ha suspendido varios derechos fundamentales, incluyendo el derecho a asistencia legal durante una detención, a ser informado de los motivos de arresto, y a la inviolabilidad de las comunicaciones y asociaciones. Además, se ha extendido el período de detención hasta 15 días sin presentación ante un juez.
Durante los 887 días de vigencia del régimen, se han registrado 81,420 detenciones de personas sospechosas de pertenecer a pandillas, aunque organizaciones locales e internacionales han reportado casos de muertes, torturas y detenciones arbitrarias. Más del 90% de los detenidos permanecen en prisión sin sentencia, y al menos 7,000 han sido liberados por falta de pruebas.
Bukele, quien fue reelecto en febrero con una amplia mayoría a pesar de la prohibición constitucional de reelección, reconoció que aún quedan más de 8,000 pandilleros libres. Sin embargo, expresó confianza en que la seguridad puede mantenerse sin el régimen de excepción.
Hasta el jueves, la organización de derechos humanos Socorro Jurídico Humanitario ha registrado 307 muertes de adultos detenidos y cuatro bebés. Bukele negó acusaciones de tortura, atribuyendo las muertes a enfermedades y afirmando: "No estamos matando a nadie en la cárcel".
En cuanto a una posible nueva candidatura presidencial, Bukele descartó la idea, citando un acuerdo con su esposa y la prohibición constitucional del artículo 152. "Tenemos un acuerdo con mi esposa de que esta es la última", afirmó.
Bukele fue reelegido con el 84,6% de los votos el 4 de febrero, a pesar de la prohibición constitucional, tras una interpretación de la sala constitucional en septiembre de 2021 que permitió una sola reelección.
Fuente: Los Ángeles Times