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La Asamblea Nacional de Ecuador decidió archivar el juicio político contra la ministra de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana, Gabriela Sommerfeld, en relación con la crisis diplomática con México provocada por el asalto a su embajada en Quito para capturar al ex vicepresidente Jorge Glas.
Con 76 votos a favor, 44 en contra y 8 abstenciones, el Legislativo ecuatoriano cerró el proceso, que había sido impulsado por la Revolución Ciudadana, el partido liderado por Rafael Correa. La moción para archivar el juicio fue presentada por el bloque oficialista Acción Democrática Nacional (ADN), tras el rechazo de la Comisión de Fiscalización a un informe de la asambleísta correísta Jhajaira Urresta, que recomendaba continuar con la fase final del juicio.
Gabriela Sommerfeld se manifestó en redes sociales diciendo: "La verdad siempre brillará. Los principios de soberanía, democracia y defensa de los intereses del Ecuador no se negocian. ¡Se defienden!"
La ministra había sido acusada por la oposición correísta de presunto incumplimiento de funciones durante la crisis con México, mientras que Sommerfeld sostenía que el juicio era un ataque contra el país y no contra ella personalmente.
Durante su defensa, Sommerfeld advirtió que el juicio podría ser utilizado por México en el litigio que ambos países mantienen en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, donde se han presentado contrademandas sobre la violación de convenios internacionales de relaciones diplomáticas.
El asalto a la embajada mexicana en Quito ocurrió el 5 de abril, después de que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador concediera asilo diplomático a Glas, quien se había refugiado en la embajada desde finales de 2023 esperando respuesta a su solicitud.
La tensión entre los dos países había aumentado previamente debido a declaraciones de López Obrador que vinculaban el asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio con el triunfo de Daniel Noboa sobre la candidata correísta Luisa González. Esta situación llevó a la expulsión de la embajadora mexicana en Quito, Raquel Serur.
Glas, que había sido vicepresidente durante el gobierno de Correa y también bajo Lenín Moreno, fue capturado tras ser imputado por peculado en el contexto de la reconstrucción tras el terremoto de 2016. Él considera que es víctima de persecución política y rechaza todas las acusaciones en su contra.
México acusó a Ecuador de violar la inviolabilidad de sus sedes diplomáticas, mientras que Ecuador argumenta que el gobierno mexicano infringió el derecho internacional al intervenir en sus asuntos internos, abusar de la inmunidad diplomática y violar normas de asilo al otorgar este beneficio a personas condenadas por tribunales ordinarios.
Fuente: Milenio
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