Chile
Redacción Sufragio
Bajo el título "Invitación por la Unidad", ha surgido una carta de profunda relevancia en el escenario político actual. El contenido de esta carta, con sus seis carillas, ha sido meticulosamente diseñado por los consejeros pertenecientes al oficialismo. Su objetivo es claro: emplazar a la facción de la derecha política a unirse en acuerdos fundamentales.
Los últimos días han estado marcados por un intercambio de declaraciones cruzadas entre estos dos sectores contrastantes. Sin embargo, los representantes de los partidos que conforman el gobierno, persistentemente, han llamado a la derecha a abrazar un consenso trascendental en el marco de la redacción de la nueva Constitución.
Este llamado cobra especial urgencia a medida que las votaciones en comisión de las indicaciones se acercan, programadas para dar inicio el próximo 28 de agosto. El ambiente dentro del órgano redactor se ha vuelto tenso debido a varias cuestiones: primero, la estrategia del Partido Republicano en su intento de forzar al Partido Comunista a abandonar el proceso prematuramente; en segundo lugar, la indecisión de Chile Vamos en cuanto a cuánto involucrarse en busca de acuerdos; y, finalmente, la posición minoritaria del oficialismo que los ha dejado incómodos, pero que también los ha impulsado a mantenerse cohesionados hasta el final del proceso, incluso si eso implica tomar una posición "En contra" en el plebiscito de diciembre.
Ante este escenario, la carta publicada no es mera casualidad; representa un intento de transmitir un nuevo mensaje al público. El texto de los consejeros comienza con una advertencia: "Aún estamos a tiempo de retomar el camino de los acuerdos que tanto necesitamos. Desaprovechar este momento sería un acto irresponsable y un error histórico".
La misiva continúa enfatizando la necesidad de un acuerdo completo y la disposición de hacer todos los esfuerzos necesarios para lograrlo. Se comprometen a buscar la unidad en la creación de una Constitución que sea representativa de todos los sectores del país.
El factor tiempo se vuelve apremiante y, en consonancia con el cronograma del Consejo, las votaciones deben comenzar a más tardar el 28 de agosto. Sin embargo, en un gesto de buena voluntad para construir acuerdos, expresan su disposición a ajustar el cronograma y retrasar el inicio de las votaciones, permitiendo un espacio para conversaciones en pos de alcanzar su objetivo.
Los consejeros del oficialismo, conscientes de su posición minoritaria en el órgano redactor, dirigen su llamado principalmente hacia los republicanos, quienes ocupan 22 de los 50 escaños del Consejo. Advierten sobre la importancia de evitar los errores del pasado y de no redactar una Constitución que no refleje la identidad del país.
La carta establece siete ejes generales en los que buscan llegar a acuerdos, considerados cruciales para el alcance de consensos en el Consejo Constitucional. Estos ejes incluyen la estabilidad institucional, igualdad, derechos sociales, seguridad, lucha contra la corrupción y abusos, protección al medio ambiente y el fortalecimiento del proceso democrático.
Las voces de los consejeros se alzan en un llamado sincero y directo. María Pardo de Convergencia Social resalta la importancia de estas ideas fuerza para construir una Constitución unida. Paloma Zúñiga de RD agrega la necesidad de acuerdos mutuos, amplios y que unan al país.
La pregunta sobre la posibilidad de acuerdos con los republicanos lleva a un tono de optimismo, planteando la importancia de un diálogo genuino y acuerdos compartidos. También se menciona la propuesta de aplazar la primera votación, demostrando la disposición a ceder por el bien de los acuerdos.
En última instancia, el oficialismo refuerza su postura al nombrar a Karen Araya, consejera comunista, como jefa de bancada de Convergencia/PC. Esto envía una señal clara de que el compromiso con el proceso constituyente sigue siendo sólido, incluso en momentos de desafío por parte de la derecha.
La "Invitación por la Unidad" contenida en esta carta refleja el urgente llamado del oficialismo a la derecha política para alcanzar acuerdos significativos en la redacción de la nueva Constitución. En un escenario político tenso y desafiante, la carta representa un intento de construir puentes y unir a un país en medio de la diversidad de opiniones y visiones.