Honduras
El Partido Liberal de Honduras (PLH) emitió una alerta sobre posibles alteraciones en el cronograma electoral rumbo a las elecciones generales del 30 de noviembre, atribuyendo esta situación a conductas del partido oficialista Libre que podrían poner en riesgo la integridad del proceso democrático.
En un comunicado oficial, el PLH señaló que Wilfredo Ochoa, consejero propietario del Consejo Nacional Electoral (CNE) por Libre, no ha asistido a las últimas cuatro sesiones del pleno, lo que, a juicio del partido opositor, ha provocado la paralización de avances fundamentales en la organización electoral. Esta ausencia reiterada fue calificada por el PLH como una falta administrativa con posibles consecuencias legales.
Además, la agrupación denunció un incidente ocurrido el 8 de julio en el Congreso Nacional, donde colectivos vinculados a Libre irrumpieron en el hemiciclo con la intención de intimidar a las consejeras Cossette López y Ana Paola Hall, lo que derivó en la suspensión de sus intervenciones y la retirada de las funcionarias.
Una preocupación central del PLH recae en el sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP), herramienta esencial para garantizar la transparencia y agilidad en el conteo de votos. Según el comunicado, miembros de Libre bloquearon recientemente el acceso al CNE, impidiendo la entrada de los operadores técnicos responsables del sistema TREP, lo que busca, a criterio del PLH, obstaculizar su implementación y debilitar la confianza ciudadana.
El Partido Liberal hizo un llamado expreso a las Fuerzas Armadas de Honduras para que ejerzan su responsabilidad constitucional de proteger el proceso electoral y la democracia. En su mensaje, instó a las autoridades militares y cuerpos de seguridad a no acatar órdenes ilegales, advirtiendo que quienes participen en acciones fuera del marco legal deberán asumir las consecuencias penales correspondientes.
Finalmente, el PLH convocó a la ciudadanía a mantenerse vigilante y defender el proceso electoral frente a lo que calificó como intentos de “robar las elecciones, la democracia y la libertad”, asegurando que no permitirán que una minoría imponga sus intereses en el país.
Esta declaración surge en un contexto de alta polarización política en Honduras, a cinco meses de las elecciones generales, planteando retos importantes para la estabilidad y legitimidad de la institucionalidad democrática.
Fuente: Tiempo