Argentina
La consigna #CristinaLibre se ha convertido en un grito global. Desde diversas ciudades del mundo, ciudadanos argentinos y simpatizantes del peronismo se han movilizado en defensa de Cristina Fernández de Kirchner, tras la reciente decisión del poder judicial que le impone prisión domiciliaria y la inhabilita de manera perpetua para ejercer cargos públicos, en el marco de la causa Vialidad. Las manifestaciones denuncian lo que consideran una maniobra de proscripción política.
Las concentraciones se replican en Milán, donde los manifestantes se dieron cita frente al consulado argentino en Via Agnello, y en Roma, frente a la embajada en Piazza dell’Esquilino. Bajo la consigna "No es una condena, es una proscripción y un ataque a la democracia", las movilizaciones europeas buscan visibilizar lo que consideran una estrategia judicial para bloquear a líderes populares.
En Lisboa, la plaza Larga da Misericordia fue el punto de encuentro para otra concentración convocada con el lema "Vienen por ella, vamos con ella". En Bogotá, la agrupación Colibrí organizó una movilización frente a la embajada argentina, recordando que "como ha ocurrido en otros países de la región, el lawfare es una herramienta para impedir la participación política de referentes populares".
En Salvador de Bahía, Brasil, se espera una importante asistencia en Praça da Piedade. Asimismo, ya se realizaron acciones en ciudades como Nueva York, Ginebra y Valencia, donde argentinos en el exterior expresaron su rechazo a lo que consideran una persecución política judicializada.
En paralelo, en Buenos Aires, miles de personas se concentran en Plaza de Mayo, epicentro histórico de las demandas populares, para respaldar a la dos veces presidenta de Argentina. Las calles aledañas también han sido ocupadas por manifestantes que repudian el fallo judicial y exigen su nulidad.
Las manifestaciones reflejan una creciente preocupación regional e internacional sobre la judicialización de la política y el uso de los tribunales para condicionar la participación democrática.
Fuente: Página 12