El embajador de Panamá ante las Naciones Unidas, Eloy Alfaro, junto con otros 116 países, expresó su firme apoyo a la petición de Suiza para proteger la seguridad de los trabajadores humanitarios de la ONU en zonas de guerra.
Alfaro destacó que, desde el inicio de 2024, más de 150 trabajadores humanitarios han perdido la vida en conflictos armados globales. Además, se subrayó en la ONU que en 2023, más de 500 miembros del personal humanitario fueron asesinados, heridos, detenidos o secuestrados en todo el mundo.
La declaración, leída en la ONU, también destacó que más del 90% de estos profesionales eran originarios de las regiones donde fueron atacados o encarcelados. En este sentido, los países firmantes reafirmaron su compromiso con la protección de la vida civil y la defensa de los derechos humanos en contextos bélicos.
El grupo de embajadores rendió homenaje a todos los miembros del personal humanitario y de la ONU que trabajan en la primera línea de los conflictos armados, a menudo en condiciones extremas. La declaración también extendió su apoyo al personal local que colabora con organizaciones no gubernamentales, cuyas vidas también están en riesgo.
“Su labor y dedicación son esenciales para salvar vidas y aliviar el sufrimiento de millones de personas en el mundo entero”, subrayó el comunicado.
Con más de 120 conflictos armados activos en la actualidad, las necesidades humanitarias continúan en aumento, mientras que la violencia contra los trabajadores humanitarios sigue creciendo, lo que es considerado inaceptable por la comunidad internacional.
Fuente: La Estrella de Panamá