La vicepresidenta Kamala Harris ha destacado el respaldo de varios alcaldes de ciudades fronterizas del estado de Arizona, mientras enfrenta críticas republicanas por su manejo de los cruces fronterizos no autorizados.
El equipo de campaña de Harris informó que ha recibido el apoyo de los alcaldes de Bisbee, Nogales, Somerton y San Luis, así como de los supervisores del condado de Yuma, Martin Porchas y Tony Reyes.
Harris está intensificando su campaña y ajustando sus mensajes para los votantes a menos de 100 días de las elecciones.
Los republicanos buscan convertir la situación fronteriza en un punto débil político para ella, similar a cómo afectó al presidente Joe Biden antes de que finalizara su campaña de reelección.
Acusan a Harris de no haber hecho lo suficiente para abordar la inmigración no autorizada en su rol de "zar fronterizo" asignado por Biden.
"Confío en que ella atienda las necesidades de las ciudades y poblados fronterizos sin aprovecharse de nosotros para su propio beneficio político, a diferencia de su opositor", expresó en un comunicado el alcalde de Somerton, Gerardo Anaya. Somerton es una ciudad de aproximadamente 14,000 habitantes en el extremo suroeste del estado.
Como vicepresidenta, Harris ha supervisado esfuerzos diplomáticos para abordar los problemas que impulsan la migración en los países del Triángulo Norte: El Salvador, Guatemala y Honduras, además de presionarlos para fortalecer la aplicación de la ley en sus propias fronteras.
El gobierno de Biden ha buscado desarrollar y establecer una estrategia a largo plazo que aborde las causas fundamentales de la migración en esos países.
La inmigración ha sido un tema central en la identidad política de Trump desde que anunció su primera campaña en 2015. El magnate presenta una imagen de una frontera fuera de control que amenaza la seguridad y la economía nacionales.
Si resulta electo para un segundo período, Trump ha prometido deportar a millones de personas que viven sin autorización en el país.
Fuente: Voz de América