España
En una de las sesiones más tumultuosas de los últimos tiempos, con intercambio de insultos y acusaciones que resonaron en los pasillos del Parlamento, se ha aprobado la ley general de amnistía en España. Esta ley, que ha superado su fase legislativa, absolverá de las imputaciones en curso en diversos tribunales a los líderes independentistas catalanes que impulsaron la declaración fallida de secesión en octubre de 2017. Para su entrada en vigor, solo falta su publicación en el Boletín Oficial de las Cortes y en el Boletín Oficial del Estado.
La normativa recibió 177 votos a favor de diputados pertenecientes al Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Sumar, Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Junts per Catalunya (JxCat), EH-Bildu, Partido Nacionalista Vasco (PNV), Podemos y el Bloque Nacionalista Galego (BNG). Por otro lado, 172 votaron en contra, representando al Partido Popular (PP), Vox, Coalición Canaria (CC) y Unión del Pueblo Navarro (UPN). A pesar de un intento de veto en el Senado, el Congreso finalmente aprobó la ley.
El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, ha cumplido así con los acuerdos alcanzados con las fuerzas independentistas catalanas, especialmente con JxCat. Este acuerdo garantizó el apoyo de los siete diputados de JxCat a su investidura, lo que aseguró su reelección en el cargo.
La aplicación de la ley queda ahora en manos de los tribunales de justicia, quienes determinarán su implementación y resolverán cualquier controversia que surja, incluyendo la posibilidad de apelar a instancias superiores como el Tribunal Constitucional español o el Tribunal Europeo de Justicia.
La reacción de la oposición, liderada por el Partido Popular, fue contundente. Alberto Núñez Feijóo calificó la nueva ley como un "acto de corrupción" que intercambia poder por impunidad y privilegios, y acusó al gobierno de mentir a los españoles al prometer que no tomarían esta medida.
Los debates en el Parlamento estuvieron marcados por los exaltados discursos y los intercambios de acusaciones. El diputado socialista Artemi Rallo, poco conocido hasta entonces, defendió la ley frente a las críticas, mientras que la vocera de JxCat, Miriam Nogueras, celebró la aprobación de la ley como una victoria democrática y un paso hacia la libertad definitiva para Cataluña.
Fuente: La Jornada