Costa Rica
Este lunes, una violenta irrupción en el espacio destinado al público del Congreso de Costa Rica causó conmoción entre los presentes. Un hombre, cuya identidad aún no ha sido revelada, protagonizó un altercado que dejó atónitos a los diputados y funcionarios presentes en la Asamblea Legislativa.
La presidenta en funciones, Gloria Navas, del partido opositor Nueva República, fue la encargada de intentar controlar la situación. "Señor, por favor, salga y desocupe la sala. Eso es una orden de la presidencia", expresó con firmeza mientras trataba de restaurar el orden. Sin embargo, sus palabras no fueron suficientes para detener al hombre, quien continuó con sus actos violentos.
Según Karla Granados, directora ejecutiva del Congreso, el individuo empezó a golpear agresivamente los vidrios y profirió amenazas de muerte a algunos diputados de los partidos de oposición, como el Partido Liberación Nacional (PLN) y el Frente Amplio (FA). La situación se tornó insostenible, y Navas decidió suspender la sesión plenaria por un lapso de cinco minutos para coordinar acciones de seguridad.
El receso permitió que los funcionarios del Congreso lograran sacar al hombre del recinto, donde lo esperaban agentes de la fuerza pública. El individuo fue detenido debido a su comportamiento violento. Según informes del Ministerio de Seguridad, permaneció bajo custodia durante dos horas antes de quedar en libertad.
La directora ejecutiva, Karla Granados, informó que se ha interpuesto una denuncia ante el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) con el objetivo de solicitar medidas cautelares para evitar que el hombre pueda acercarse nuevamente a la institución. La denuncia ya ha sido trasladada al Ministerio Público, que ha abierto una causa y está a la espera del informe de la Fuerza Pública para avanzar con el proceso.
Después de restablecer el orden, la sesión plenaria se reanudó y se le otorgó nuevamente la palabra a la diputada Rocío Alfaro, representante del izquierdista FA. Los presentes expresaron sorpresa y desconcierto por los eventos que habían ocurrido momentos antes.
Al retomar su participación, Alfaro hizo hincapié en la importancia de un debate enriquecido por personas serias que tengan el bienestar de Costa Rica como objetivo, y no por aquellos que propaguen el odio y la violencia. La diputada reafirmó su convicción en un diálogo constructivo y respetuoso para el beneficio del país.
Este incidente ha dejado en evidencia la necesidad de reforzar las medidas de seguridad en el Congreso de Costa Rica para garantizar la integridad de todos los presentes y mantener un ambiente propicio para el debate político. Las autoridades competentes deberán evaluar las circunstancias que llevaron a este episodio y tomar las medidas necesarias para evitar situaciones similares en el futuro.
Redacción Sufragio