El actual alcalde de Arica, Orlando Vargas, lanzó duras críticas contra la administración municipal anterior, encabezada por Gerardo Espíndola, en el marco de la controversia nacional por el uso irregular de licencias médicas. Según el último informe de Contraloría, la comuna figura en la tercera posición a nivel nacional con 719 funcionarios implicados en prácticas indebidas durante los años 2023 y 2024.
La situación se enmarca en un escándalo mayor, donde más de 25 mil funcionarios públicos habrían salido del país mientras estaban con licencia médica activa, generando un fuerte cuestionamiento a la ética en la función pública y a los mecanismos de control en distintas instituciones del Estado.
En conversación con Expreso Bío Bío, el alcalde Vargas expresó su indignación y responsabilizó directamente a su antecesor. “Estoy profundamente avergonzado por esta situación. Es lamentable que Arica esté en los primeros lugares en este tipo de prácticas. Esta es una herencia del gobierno municipal anterior, encabezado por el señor Espíndola, quien fue respaldado por el diputado Vlado Mirosevic”, señaló.
Vargas fue enfático en señalar que, además del mal uso de licencias médicas, la administración anterior habría incurrido en múltiples prácticas irregulares. Aseguró que más de 1.750 contrataciones dentro del municipio habrían respondido a “favores políticos o amiguismo”, y que actualmente su equipo trabaja en identificar a los responsables para iniciar las acciones legales y administrativas correspondientes.
“El municipio cuenta hoy con 6.750 trabajadores, muchos de los cuales ingresaron sin criterios técnicos. Estamos investigando caso a caso para aplicar sumarios y, si corresponde, presentar denuncias ante la justicia”, detalló el edil.
Asimismo, denunció que el uso abusivo de horas extraordinarias también sería parte del mecanismo de desfalco: “Se roba con horas extras. Hay funcionarios que registran una cantidad excesiva de ellas, sin justificación”.
Vargas también criticó la falta de productividad durante la gestión anterior, acusando un clima laboral caracterizado por la informalidad y la ausencia de controles internos. “Acá se timbraba en la mañana y luego los funcionarios salían a tomar café al paseo 21 de mayo. Volvían solo para cumplir con la presencia mínima. Era una práctica generalizada”, relató.
Incluso, reveló que en el departamento de Tránsito “se sabía a viva voz” que se vendían licencias, una acusación grave que ya está siendo investigada.
El alcalde agregó que al asumir el cargo en diciembre de 2024, encontró una municipalidad “quebrada, endeudada y enfrentando múltiples juicios”, lo que, a su juicio, refleja una administración deficiente y una total falta de responsabilidad fiscal. “Este es el municipio con menos recursos del país, porque fue entregado en ruinas financieras”, sentenció.
Vargas recalcó que desde su llegada se han tomado medidas concretas para erradicar estas prácticas y sanear la administración municipal. Denunció que algunos funcionarios vinculados a la gestión anterior han utilizado licencias médicas prolongadas –algunos por más de 90 días– para evitar ser desvinculados. “Estamos hablando de sueldos de tres y hasta cuatro millones de pesos mensuales. Es insostenible. No descansaremos hasta que devuelvan los recursos mal utilizados y enfrenten las consecuencias legales”, afirmó.
El alcalde concluyó señalando que ya se han iniciado sumarios internos y que su administración está comprometida con llevar ante la justicia a todos aquellos responsables de estas prácticas irregulares. “Vamos a investigar caso a caso. No es fácil, pero es un deber con los ariqueños y con el Estado”.
Este caso se suma a una serie de denuncias similares en diversas instituciones del país, lo que ha motivado una revisión exhaustiva por parte de la Contraloría General de la República y ha encendido el debate en torno a la ética pública y la eficiencia en el uso de recursos estatales.
Fuente: BioBio
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