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Alejandro Moreno, presidente nacional del PRI, afirmó que su partido no se “dobló” ni se “quebró” ante la reciente reforma judicial, la cual planea impugnar ante instancias internacionales.
Moreno elogió a los líderes de sus bancadas en el Senado y la Cámara de Diputados, Manuel Añorve y Rubén Moreira, por su firmeza y resistencia frente a las “brutales” presiones. Destacó que el PRI fue el único partido que mantuvo su postura en contra de la reforma, logrando así un reposicionamiento favorable en diversos sectores sociales.
Durante una reunión virtual con presidentes de los Comités Directivos Estatales y otros dirigentes, Moreno calificó la reforma propuesta por el gobierno como “una locura”, y reiteró la determinación del PRI de oponerse de manera contundente. Anunció que, tras la declaración de constitucionalidad de la reforma, el partido preparará una estrategia jurídica robusta para combatirla tanto a nivel nacional como internacional.
El presidente del PRI también denunció las presiones recibidas por sus legisladores, incluyendo ofertas económicas y amenazas de persecución. Afirmó que se intentó presionar al partido a través del INE, lo cual fue rechazado de manera firme.
Moreno subrayó su compromiso con los principios, valores y derechos fundamentales, enfatizando que el PRI continuará votando en contra de reformas que atenten contra la estabilidad del Estado y los derechos de las familias mexicanas.
Finalmente, el líder del PRI adelantó que a finales de septiembre y principios de octubre comenzará un proceso de reflexión y reposicionamiento del partido, con base en los acuerdos de la Asamblea Nacional. También mencionó que la Comisión de Justicia Partidaria está evaluando solicitudes de expulsión de militantes que votaron en contra de la postura oficial del PRI sobre la reforma judicial.
Fuente: Milenio
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