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Evo Morales, líder del Movimiento al Socialismo (MAS), aseguró que distanciarse del presidente Luis Arce y su administración fue una decisión estratégica crucial para la supervivencia del partido. Según Morales, sin esta separación, el MAS habría estado al borde de la quiebra política. El exmandatario afirmó que el MAS está listo para regresar al poder con renovada fuerza, describiendo su retorno con la frase "paso de parada".
"Si no hubiéramos marcado una diferencia como militantes del MAS, estaríamos hundidos en este momento junto a Lucho. Hemos salvado al MAS al definir claramente nuestra postura. Ahora, regresaremos con paso de parada a la Casa Grande del Pueblo", declaró Morales durante una concentración en Caranavi, La Paz.
Morales recordó que hasta 2021, el MAS respaldó la administración de Arce. Sin embargo, denunció que la corrupción, la mala gestión y el encubrimiento de actividades ilícitas fueron factores que motivaron el distanciamiento del partido del actual mandatario.
"En cuatro años ni siquiera se ha completado la carretera Coroico-Caranavi, un proyecto simple. En septiembre de 2022, me di cuenta de la magnitud de la corrupción, que no solo es individual, sino institucional e incluso familiar. Eso no lo podemos respaldar", detalló.
El líder del MAS también criticó la elección de Arce y David Choquehuanca como candidatos presidenciales en 2020, calificándola como un error. A pesar de que el gobierno controla el poder Ejecutivo, el Judicial y los medios de comunicación, Morales subrayó que la gestión de Arce ha dejado una imagen negativa.
"El Gobierno tiene control sobre el Estado, el poder judicial y los medios de comunicación. Con tal aparato, están hundidos Lucho y David", concluyó Morales.
Fuente: El Mundo
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