El Senado argentino revierte los vetos de Milei y devuelve fondos a universidades y hospitales pediátricos
El Senado argentino asestó un duro revés político al presidente Javier Milei al rechazar, por amplia mayoría, los vetos que había impuesto a las leyes de financiamiento universitario y de emergencia en salud pediátrica. Con 58 y 59 votos en contra de los vetos y solo 7 a favor, la Cámara alta ratificó este jueves las normas que habían sido aprobadas en agosto, dejando en evidencia la debilidad parlamentaria del oficialismo a tres semanas de las elecciones legislativas.
El rechazo fue categórico y se sumó al dictamen previo de la Cámara de Diputados, lo que obligará al Ejecutivo a promulgar ambas leyes. La decisión implica la inmediata reasignación de recursos a los hospitales pediátricos —con énfasis en el Hospital Juan Garrahan, el mayor centro de salud infantil del país—, mejoras salariales para su personal y la actualización presupuestaria de las universidades nacionales en función de la inflación acumulada. Desde la llegada de Milei al poder, ambos sectores denunciaban una pérdida superior al 30 % en su poder adquisitivo.
El presidente había vetado estas leyes en septiembre argumentando que ponían en riesgo el equilibrio fiscal y la estabilidad macroeconómica. Sin embargo, el Congreso volvió a marcarle límites al Ejecutivo: se trata del tercer veto presidencial rechazado en un mes, algo que no ocurría en Argentina desde 2003, cuando el interinato de Eduardo Duhalde.
En las inmediaciones del Congreso, docentes, estudiantes, médicos y enfermeros celebraron el resultado de la votación. Durante el debate, el senador peronista José Mayans defendió la necesidad de un Estado responsable en materia de salud y educación, mientras que Daniel Bensusán advirtió que “la educación superior es un derecho humano y una condición imprescindible para el desarrollo del país”. Desde la oposición centrista, Martín Lousteau (UCR) calificó de “increíble y patético” volver a discutir medidas que ya habían sido aprobadas hace dos meses y subrayó que tanto las universidades como el Hospital Garrahan son “políticas públicas con reconocimiento internacional”.
La Libertad Avanza, en soledad, defendió la posición presidencial. El senador Ezequiel Atauche acusó a la oposición de “usar banderas nobles con fines electorales” y justificó los recortes por supuestas ineficiencias en la gestión de universidades y hospitales.
El choque entre el Congreso y el Gobierno se produce en un contexto de creciente fragilidad económica, con un plan de ajuste en entredicho y el Fondo Monetario Internacional reclamando a Milei construir consensos políticos más amplios para sostener la confianza en su administración.