Xóchitl Gálvez, aunque visiblemente afectada, mostró su entereza al reconocer su derrota en los comicios. Con una expresión de resignación, pero aún manteniendo su dignidad, salió en la madrugada del lunes para admitir que los resultados no estaban a su favor. En un gesto de civismo, deseó suerte a Claudia Sheinbaum, candidata de Morena y sus aliados, a quien reconoció como la próxima presidenta del país.
Destacó el hito histórico que representa tener a la primera mujer presidenta en México, mientras enfatizaba la necesidad de resultados y soluciones para los problemas del país, así como el respeto a la Constitución y las instituciones democráticas.
A pesar de sus alegaciones sobre una posible intervención gubernamental, reiteró su compromiso con la democracia y la defensa de la República. Advirtió que continuará en la lucha, ya sea en tres o seis años.
Ahora, instó a dejar atrás la división generada durante la campaña y avanzar hacia la reconciliación, priorizando lo que une a los mexicanos en su país.
Gálvez emitió su voto temprano en la primaria El Chamizal, en la colonia Reforma Social, tras enfrentar el apoyo y el ánimo de sus seguidores en el camino. Por la noche, en su búnker en el hotel Presidente Intercontinental de Polanco, reconoció los resultados y felicitó a Sheinbaum por teléfono, expresándole su deseo de que resuelva los problemas del país.
Su gesto de civismo y respeto hacia el proceso electoral refleja su amor por México y su compromiso con el bienestar del país.
Fuente: La Jornada
